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Davos 2013: ¿Superar el espíritu de crisis?

La 43 edición del Foro Económico de Davos comienza en Suiza con la significativa ausencia de representantes de Estados Unidos y China, y la anulación del acostumbrado patrocinio de Google y la copresidencia de UBS y Coca-Cola 


Martes 22 de Enero de 2013 | 01:00:00 AM 

Autor

Luis Ubeda

Para Klaus Schwab, fundador y presidente del Foro Mundial de Davos (WEF, por sus siglas en inglés), “la firmeza o resistencia son sinónimo de adaptación a los contextos cambiantes, con sus choques, recuperaciones y desafíos críticos”. Y a continuación agrega: "Tenemos que dejar de estar en 'modo de crisis', esta situación amplificada por los medios".

Sin embargo, Schwab tendrá que aceptar que las principales “figuras” de esta edición sean políticos europeos inmersos en una crisis económica y de liderazgo sin precedentes, y primeros ministros de naciones que han dejado atrás gobiernos autoritarios y que aún luchan por instaurar un Estado de derecho estable.

¿Quiénes encabezan la lista? Los primeros ministros de Gran Bretaña e Italia, David Cameron y Mario Monti, y la canciller alemana, Angela Merkel, a quienes se suman la mayoría de los ministros de Finanzas del Viejo Continente para que debatan con los directivos de las principales compañías del mundo cómo salir del atolladero.

América Latina, el continente “escapado”

Hablando en términos ciclísticos, Latinoamérica llega a esta 43 edición de Davos “escapado”, o sea, muy por delante de las antaño sólidas economías europeas. Es, sin duda, una de las regiones que mejor ha resistido desde el debut de la actual crisis económica y financiera de 2008, a raíz del estallido de la burbuja financiera estadounidense. Tanto es así que, en 2013, el PIB de la zona crecerá 3,5 %, según estimaciones del Banco Mundial, casi el triple de lo que crecerá Suiza (+1,3 %), uno de los alumnos más aventajados de Europa.

Mientras, la mayoría de los 27 afronta una realidad muy diferente y mucho menos optimista, con un pronóstico de contracción económica de 0,10 % para la región y de 1,4 %, por ejemplo, para la España regida por el derechista Partido Popular desde hace un año.

No obstante, los “escapados” tendrán escasa presencia en el Foro, sobresaliendo las ausencias de los presidentes Dilma Rousseff, de Brasil, Enrique Peña Nieto, de México, y Juan Manuel Santos, de Colombia. Claro que hay una razón poderosa para ello: la reunión en la estación alpina coincide con la Cumbre Unión Europea, América Latina y el Caribe de Santiago de Chile, a desarrollarse los días 26 y 27 de enero, a la que asistirán los mandatarios antes citados, la canciller alemana, Angela Merkel (lo hará brevemente a ambos encuentros) y representantes de alto nivel de Francia, Portugal, Gran Bretaña y la Comisión Europea, junto al presidente anfitrión, Sebastián Piñera.

Para el WEF, en 2013 el continente sudamericano se caracterizará por sus “niveles de crecimiento económico estables en tiempos de creciente complejidad global e incertidumbre económica”, lo que -a juicio del Foro- le ha aportado a esta zona “grandes volúmenes de inversión extranjera y turismo”. Según el perfil más reciente del Foro Mundial sobre la región, en ella descuella

la importancia de un elemento primordial: contar con 150 millones de jóvenes de entre 15 y 29 años de edad, uno de cada cuatro habitantes.

Davos 43 por dentro

La prensa acreditada coincide en que el primer ministro italiano Mario Monti será el encargado de “fijar el tono” para los dirigentes políticos y empresariales, con un discurso titulado "Liderando en contra de las probabilidades". Aclarado esto, la cita reúne a 2 500 participantes de 100 naciones, de las cuales 900 son altos ejecutivos, 300 figuras públicas y alrededor de 50 jefes de Estado o de Gobierno, enzarzados en hallar la pista por donde pueda transitar sin escollos el "dinamismo resistente", lema del presente foro… algo difícil de digerir cuando echamos un vistazo a la crisis casi perpetua que aqueja a sus economías, y a sus empresas una crisis financiera global y algunos escándalos propios.

Sin embargo, a pocas horas de inaugurar el evento, Klaus Schwab sigue dando muestras de optimismo al declarar en una conferencia de prensa que “está muy claro que el futuro de la economía mundial está basado en restaurar la confianza. Restaurar la confianza en los líderes, restaurar la confianza en nuestro futuro. Y esto significa que tenemos que salir de esta modalidad de crisis".

Tiene razón el fundador de WEF. Richard Edelman, presidente de la empresa global de relaciones públicas que lleva su apellido, admite que “existe una increíble falta de confianza en el liderazgo, pues los niveles de confianza en los gobiernos (de esos países) son peores que los de las empresas, pero ambos son terribles".

El sondeo anual de Edelman aparecido el pasado lunes 21 de enero en 26 países mostró un aumento en la confianza en las empresas y en los gobiernos frente a 2012, pero sólo un 26 % de los encuestados confía en que los líderes empresariales resolverán temas sociales, mientras que un 15 % cree eso sobre los líderes gubernamentales.

Aunque Europa logró mantener intacta a la zona euro en el 2012 y Washington evitó a último minuto el "abismo fiscal, el Foro Económico Mundial de este mes mostró que los líderes empresariales y académicos temen que los políticos estén fallando a la hora de lidiar con los problemas fundamentales.

Por último, el 43 Foro Económico de Davos también será recordado por algunos detalles que le agregan glamour: el mago de la informática Bill Gates y su tocayo, el expresidente de Estados Unidos, Bill Clinton, o cuando los asistentes se sorprendían con los actores estadounidenses Angelina Jolie y Brad Pitt cruzando los pasillos del Congress Center, el edificio que acoge cada año el foro.

Pero además quedarán en el recuerdo los años en que Google, que en las últimas ediciones devino refugio nocturno de los participantes gracias a su moderno, acogedor y exclusivo local de fiestas, declino participar, a lo que se suma el escándalo protagonizado por UBS, el primer banco suizo, tras comprobarse prácticas fraudulentas en varios países por, o que Coca-Cola acaba de hacerse un “harakiri” mundial tras reconocer su parte de culpa en el grave problema de la obesidad que afecta a la gran mayoría de los estadounidenses.

Solo queda esperar, ahora, si los reunidos en la selecta estación alpina suiza del cantón de los Grisones logren aunar esfuerzos (y sobre todo dinero) para superar el espíritu de crisis en que la tríada Unión Europea, Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional han sumido a la mayoría de los países europeos, en especial a los 17 del bloque euro.

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