Autor: Jorge Camarero Leiva Publicado: 21/06/2021 | 09:38 pm
Un lote de 100 equipos nuevos de la marca Yutong, acaba de incorporar a sus servicios la Empresa de Ómnibus Nacionales; sin embargo, esta costosa inversión del Ministerio de Transporte (Mitrans) no bastaría para dar respuesta a las numerosas demandas relacionadas con la calidad de los viajes interprovinciales sin la vital colaboración de tripulantes y pasajeros.
La mayoría de los vehículos recién adquiridos -que se suman a otros 100 ómnibus modernos incorporados el año 2015-, fueron destinados esta vez a las bases de numerosas provincias como parte de la estrategia del organismo para potenciar también desde esos territorios la transportación en las rutas nacionales.
En años recientes el deterioro de una buena parte del parque de ómnibus disponibles y su disminución en operaciones, devenían principales quejas de la población, situación desfavorable sobre todo en las provincias, por lo que recaía sobre La Habana -por ser la base con más carros- la responsabilidad de transportar el mayor número de viajeros en los recorridos más largos.
Simultáneamente los técnicos de la referida empresa se dieron a la tarea de reparar y alargar la vida de los viejos Yutong de su flota; a los que estaban en mejor estado le instalaron modernos motores, a la vez que proponían a los fabricantes numerosas innovaciones con el fin de remodelar y perfeccionar los nuevos.
Cien de estos modelos, valorados en 131 000 dólares, que llegaron a Cuba a finales del pasado año, cuentan con todas las modificaciones propuestas por los especialistas.
Entre las ventajas de las mejoras está la ampliación del espacio entre los asientos y las adaptaciones para que los últimos cuatro tuvieran reclinación, lo que ofrece mayor confort a los pasajeros. Desde el punto de vista técnico, estos tienen más amortiguadores que los precedentes, lo que ayuda en la estabilidad del ómnibus; una mejor climatización; recibieron en la cubierta un proceso anticorrosivo en correspondencia con el clima tropical imperante en Cuba, garantizando de 10 años de vida útil, y un sistema de motor dotado de varios sensores que hacen que, ante una mínima avería, el ómnibus se detenga y no se estropeen otras de sus partes tecnológicas.
Preservar el entorno
La Unidad Empresarial de Base Augusto César Sandino, ubicada en el capitalino municipio del Cerro, tiene 80 vehículos en funcionamiento, de los cuales 39 son nuevos. Joan Pérez Rodríguez, ingeniero mecánico y director de dicha unidad, explicó que los equipos recién adquiridos no expulsan dióxido de carbono y pueden recorrer hasta cuatro kilómetros con un litro de petróleo, “lo que los hace más económicos y eficientes”, afirmó.
El directivo informó además que no ha tenido problemas técnicos con los carros nuevos y que, si así ocurriera, cuentan con todos los materiales y recursos para darles el debido mantenimiento, con el fin de extender por cinco años su vida útil. “Luego de cada regreso, los ómnibus se someten a una revisión exhaustiva, con el fin de determinar si tienen algún fallo técnico, se engrasan completamente y se limpian a fondo por dentro y por fuera. Luego pasan al área de disponibilidad, donde permanecen hasta su próxima salida”.
La unidad cuenta además con un sistema de innovación que se retroalimenta de las ideas y quehacer de los trabajadores, quienes contribuyen a mantener a flote muchos de los carros antiguos. Entre las innovaciones que se han adoptado está la de la romana, pieza encargada de compensar la cantidad de aire que levanta la carrocería.
Dufotey Blanco, mecánico de la UEB Sandino, dice que “la mayor limitación es que para los carros viejos no tenemos las piezas de repuesto en el momento preciso, pues si estas no se cambian en el plazo debido pueden estropearse otras y se para el vehículo. Hay que tener en cuenta que esos automotores tienen más de 10 años de explotación y aunque los nuevos poseen mejor acabado, sus rodamientos se desgastan muy pronto, sobre todo los delanteros.”
Cuidar el ómnibus
La UEB Sandino tiene una plantilla de 436 trabajadores, de ellos, 239 son choferes con más de 10 años de experiencia, con edades que oscilan entre los 27 y 70 años. Su plan mensual es de unos siete millones de pesos y transportan, anualmente, entre tres y cuatro millones de pasajeros.
Su línea de trabajo actual se centra en ofrecer un servicio integral más allá del traslado de personas, de ahí que se procure que los choferes den un trato familiar al pasajero.
Sentido de pertenencia
Lino Matos Lambert tiene 19 años de experiencia. “Pienso que para ser un buen chofer es vital mantener un diálogo constante con las personas, también el sentido de pertenencia tiene un papel fundamental, uno debe querer a su ómnibus como su único recurso de trabajo. El mío es de los viejos, pero soy su esclavo y no entra en el taller sin mí”, afirma.
No hay dudas que la costosa inversión del Mitrans no bastaría para dar respuesta a las numerosas demandas relacionadas con la calidad de los viajes interprovinciales. Se requiere del concurso de choferes y trabajadores de cada base para mantener a punto cada uno de los nuevos vehículos y de la solidaria participación de los pasajeros.