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Aprovechar cada respiro del clima

En encuentro con trabajadores de centrales y plantaciones cañeras, directivos del sector llamaron a elevar la eficiencia de la zafra azucarera durante la campaña 2015-2016


Jueves 11 de Febrero de 2016 | 01:00:00 AM 

Autor

Amado de la Rosa Labrada

La actual zafra azucarera transcurre bajo acentuadas adversidades climáticas; primero intensa sequía y, seguidamente, lluvias caprichosas en noviembre, diciembre y enero que han originado atrasos considerables en la producción.

Tal problema se manifestó -en mayor o menor volumen- en todas las provincias responsabilizadas con la cosecha, tanto en el normal desarrollo de los cultivos cañeros, como en la realización de la campaña azucarera 2015-2016, dificultades que se extienden, además, a otras labores agrícolas.

Directivos del sector, en encuentro con trabajadores de fábricas azucareras y plantaciones cañeras, expresaron que lejos de lamentos o justificaciones, frente a las dificultades, el momento es de moler más y aprovechar mejor los espacios que ofrezca el cambiante clima.

La presente zafra comenzó en noviembre pasado tras afrontar en la etapa de preparación y cultivos una intensa sequía, considerada la peor en los últimos años. No obstante, se proyecta la incorporación de 50 ingenios a la molienda actual, uno más que en la anterior.

Durante la temporada (2014-2015) la producción azucarera creció 18 % respecto a la anterior, considerado el mayor volumen alcanzado en los últimos 11 años, a pesar de que el plan previsto se quedó en el 96 % de los objetivos.

En esta zafra persiste,  por un lado, la poca madurez de la caña con su negativo impacto en los rendimientos y, del otro, las lluvias frenan el aprovechamiento industrial. Centrales como el Melanio Hernández, de Sancti Spíritus, han parado ya la molida durante 100 horas, mientras el coloso Uruguay suma más de 160 horas, según publicó el periódico provincial Escambray.

De tal escenario se desprende una molida por debajo de lo previsto en cada ingenio y en lo que respecta a la eficiencia industrial se enmarca en más de un entero por debajo del plan, comportamiento derivado de la baja concentración de sacarosa en la materia prima a partir de la alta humedad de los suelos y las elevadas temperaturas, situación que, por ejemplo, en la provincia espirituana, ha dejado de fabricar más de 4 000 toneladas de azúcar y de consumir 48 000 toneladas de la gramínea sin respaldo productivo.

Sin embargo, aún con esa situación, ese territorio del centro del país -importante productor-, figura entre los de mejor comportamiento a nivel nacional. Sobresale el trabajo en el frente energético y los centrales tienen buena preparación para moler en condiciones de humedad, lo cual se evidencia en la alta calidad del  azúcar, a la vez que reafirman la estrategia de aprovechar al máximo cada tregua que proporcione el clima.

No se detiene la zafra

En la provincia de Camagüey Mercedes Jacob, analista principal de la Empresa Azucarera en el territorio, dijo a la Agencia Cubana de Noticias (ACN) que ya la producción de crudos acusa un atraso importante, resultado de los bajos niveles de procesamiento de materia prima en los cinco centrales participantes en la campaña.

La media de aprovechamiento de la capacidad fabril se comporta al 68 %, registro al que solo escapan los ingenios Siboney (90) y Carlos Manuel de Céspedes (72).

Pero industrias de peso por ser las de mayores posibilidades de molida como Batalla de Las Guásimas (el de mayor capacidad del territorio, el cual debió abrir la contienda)  y Brasil reportan porcentajes demasiado bajos, con el 47 y el 58, respectivamente.

El déficit en el abastecimiento de la gramínea a las fábricas y la persistente humedad residual en las plantaciones y caminos hace que el rendimiento industrial, uno de los medidores principales de la eficiencia, esté al 89 %.

Las probabilidades de mejorar la situación dependen del comportamiento de las lluvias pues de persistir, como indican los pronósticos meteorológicos, el estado de la zafra empeorará.

Con el retraso que ya acumula Camagüey en la elaboración de azúcar la molienda se extenderá hasta mayo, según estiman especialistas en esta rama de la economía.

En Las Tunas y Villa Clara

Igual en la provincia de Las Tunas la producción de azúcar marcha desfavorablemente, pues de acuerdo con las inversiones capitales y la extensa etapa de reparaciones que se realizaron en las tres industrias, se esperan mayores avances, publicó el sitio web de Radio Victoria.

Añade que aún cuando resta un buen tramo por andar, no debe haber conformismo y mucho menos bajar la guardia principalmente por la imperiosa necesidad de revertir los parámetros de eficiencia fabril que exhiben hoy los ingenios de la provincia.

De manera general los tres centrales que participan en la zafra no han comenzado con buen paso, el coloso Antonio Guiteras, a causa de problemas operativos, mientras que el Majibacoa y el Amancio Rodríguez, por dificultades con la disponibilidad de la materia prima. Estos dos últimos salvan la honra en la eficiencia al moler de manera más estable en los últimos días, destacó Radio Reloj en su sitio web.

Para esta campaña la provincia tiene un plan superior a las 185 000 toneladas de azúcar crudo, cifra que representa un decrecimiento de 19 % con respecto a la zafra anterior, en la que se concretaron poco más de 204 000 toneladas.

Entretanto continúa la zafra en Villa Clara con el reingreso del central Carlos Baliño a la actual contienda azucarera, provincia que reanudó la cosecha, detenida por seis días, igualmente debido a la humedad de los suelos.

Esta situación conllevó a que las tres fábricas que debían incorporarse a la molienda durante este período  tuvieran que retrasar su cronograma de arrancada, y hacer reajustes en dependencia de las condiciones climáticas.

Villa Clara se reincorporó luego de mejorar el estado de los cañaverales anegados por las aguas, que impedía el avance de las máquinas, y el acopio de la materia prima libre de impurezas.

En la actual temporada en ese territorio se prevé la participación de nueve centrales, así como tres refinerías, con el propósito de alcanzar más de 250 000 toneladas de azúcar.

Estabilidad en Holguín

Los centrales en operaciones en la actual zafra azucarera en la provincia de Holguín muestran signos de estabilidad en cuanto al aprovechamiento de la norma potencial diaria de molienda de caña.

El referido indicador resultó el más distintivo dentro del proceso industrial durante la primera semana de febrero, mientras que los bajos contenidos de azúcar en las cañas es aún el parámetro de mayor preocupación en lo que va de la contienda, iniciada en el territorio a principios de enero, señala el sitio web de Radio Angulo.

Agregó la publicación que Pedro Silva, director de la Empresa Provincial Azucarera, subrayó que desde el punto de vista operacional el central Cristino Naranjo registró el mayor acumulado de la molida y fue el único entre los tres ingenios en zafra en cumplir su plan de azúcar del período.

Eso demuestra, precisó, que aún con las afectaciones por lluvias y otras incidencias en el orden de medios y equipos para las labores de la cosecha y transportación de la caña es factible lograr molidas altas y estables y mejorar a la vez los indicadores básicos de eficiencia agroindustrial.

Para ello el Consejo de Dirección de la entidad azucarera en Holguín definió como medidas de seguimiento sistemático en su evaluación de la marcha de la zafra, la de moler caña fresca y eliminar el exceso de materias extrañas que llegan desde los campos a los molinos y reforzar las acciones para elevar la extracción del crudo en el proceso de fabricación.

El oriental territorio tiene en activo a tres de sus cuatro centrales previstos a moler en esta contienda con el Cristino Naranjo a la vanguardia en los indicadores básicos del proceso agroindustrial, en tanto el ingenio Loynaz Hechavarría muestra tendencias a mejorar sus operaciones.

Granma en la retaguardia

Aunque la zafra constituye hoy una tarea priorizada en la provincia de Granma, la actividad no acaba de lograr la estabilidad requerida, informo el sitio web de Tunasvisión.

El lunes último la provincia molía al 62 %, comportamiento promedio de la campaña, que debe agilizar los procesos en aras de aprovechar más cada momento en las industrias y en el campo, a fin de mejorar los resultados del último lustro, que ubican a Granma en la retaguardia de esa actividad en el país.

No se puede obviar que la humedad afecta a tres de los cinco centrales granmenses que intervienen en la zafra azucarera 2015-2016, pero ello no puede frenar la capacidad de dar respuesta oportuna a los obstáculos.

Los centrales Bartolomé Masó, del municipio homónimo, el Arquímides Colina, de Bayamo, y el Roberto Ramírez, de Niquero, presentan problemas en la cosecha por exceso de humedad, mientras que en el ingenio Grito de Yara, de Río Cauto, no estabilizaba la molienda por perjuicios en la industria.

Completa el quinteto fabril granmense el Enidio Díaz, de Campechuela, que aunque lleva una década entre los mejores del país, y mantiene un paso estable, no está exento de dificultades en la cosecha y problemas industriales, estos últimos derivados de la obsolescencia tecnológica.

Se requiere apretar el paso, porque cada día se torna más lejano el deseo de completar las más de 140 000 toneladas para la presente campaña.

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