Pinar del Río.-Aunque en proceso de aprobación, esta oferta permitirá a los visitantes realizar recorridos de varias jornadas por estas áreas, localizadas en la Sierra del Rosario, una de las seis reservas de la biosfera en Cuba.
Las rutas diseñadas incluyen ríos, restaurantes campesinos, talleres de artes plásticas, ruinas de cafetales del siglo XIX y la comunidad de más de 200 viviendas que da nombre al Complejo.
Ese asentamiento radicado en “balcones terrestres” típicos de la técnica agrícola del terraceo, tiene por insignia al hotel La Moka, acreedor del sello Reconocimiento Ambiental Nacional, uno de los logros del combinado Las Terrazas en sus años de existencia.
En la instalación se organizan excursiones hacia diversos puntos turísticos de Vueltabajo, como Viñales y Soroa, además de prestar diversos servicios en la piscina, bar y restaurantes, con comidas internacionales, criollas y a base de vegetales para quienes la prefieren.
Otra de las opcionales, en coordinación con la Estación Ecológica Sierra del Rosario, son los senderos La Cerafina y Las Delicias. En ellos se aprecian diversas formaciones vegetales, entre ellas los bosques siempre verdes, las sabanas y pinares, así como se familiarizan con las especies forestales y sus usos.
Con gran beneplácito disfrutan del paseo para la observación de aves, de unos cuatro kilómetros, al existir aquí un corredor natural entre Soroa y Las Terrazas, por lo que no resulta difícil encontrar el tocororo, el tomeguín del pinar, el carpintero verde, el zun zun, por solo mencionar algunas de las más de cien especies que aquí habitan, de las cuales 11 son endémicas.
Cerca del 70 % de los pobladores están vinculados a las distintas labores de la comunidad, a la vez que protagonizan la simbiosis hombre-naturaleza, manifiesta en el cuidado de los bosques, de las redes viales e hidráulicas y el fortalecimiento del trabajo cultural. Asimismo, son protagonistas de los diversos proyectos que se acometen en aras del desarrollo económico y el bienestar social de los habitantes.
