La empresa vinícola cubano española Bodegas del Caribe reafirmó su presencia en el polo turístico de Trinidad, donde presentó algunas de sus ofertas ante el Club local de Sommeliers.

La degustación incluyó el benjamín de los vinos nacionales, el Castillo del Wajay en su tipo blanco, seguido de otras ofertas ibéricas como el Torre de Mudéjar rosado y el Palacio de Arganza tinto, todos con aceptación entre los especialistas.

Maitres, sommeliers y compradores de las distintas cadenas de tiendas, hosterías y restaurantes del territorio, comprobaron la calidad de la primera vendimia de la fruta nacional, resultante principal de la introducción exitosa de 22 variedades de uvas en las zonas de Batabanó, Wajay y Banao, esta última en la propia provincia de Sancti Spíritus.

La entidad mixta cubano-española fomenta en la Isla el cultivo de la vid en más de 40 hectáreas, además de comercializar otros vinos españoles, como los Señorío de Antigua, Alba Real y Señorío de Peñalba, este último el único introducido en Cuba con denominación de Origen de Bierzo.

Bodegas del Caribe incluye entre sus proyectos en la Isla una industria localizada en Ceiba del Agua, en las afueras de la capital, con tecnología de última generación en su tipo, que permitirá el procesamiento de los mostos nacionales e importados, el embotellamiento y envejecimiento de la oferta, incluso también ampliar el catálogo.