Autor: Raúl Pupo Publicado: 21/06/2021 | 09:32 pm
Agroindustrial Ceballos es una de las 37 empresas del país seleccionada por el Ministerio de Comercio Exterior e Inversión Extranjera para brindar servicios de importación y exportación a las formas de gestión no estatales. Esta decisión tiene como antecedente las acciones que ha realizado la empresa durante este año para la exportación de producciones varias de Cooperativas de Créditos y Servicios, Cooperativas de Producción Agropecuaria y de Unidades Básicas de Producción Cooperativa.
La medida, que se inserta dentro de la estrategia del país para promover la recuperación económica, permitirá no solo incrementar las exportaciones globales, con la consecuente multiplicación de ingresos, sino que les generará ganancias en moneda libremente convertible a los productores directos, lo que les permitirá desarrollarse, a partir de la posibilidad de importar piezas y recursos imprescindibles en la continuidad del ciclo productivo.
Para eso, se trabaja en la búsqueda de mercados foráneos para fomentar la comercialización de surtidos producidos por el sector cooperativo, entre estos frutas frescas, cítricos como limón, así como los rubros de las mininindustrias, algunos ya insertados en la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZED).
Exportaciones y búsqueda de nuevos nichos
Ante la interrupción de las exportaciones, a causa de la pandemia, la unidad de Acopio y Beneficio del Carbón se enfocó en la recogida y almacenamiento del producto para reiniciar la comercialización del carburante en cuanto fuera posible, logrando exportar hasta el cierre de junio poco más de 10 500 toneladas.
En ese período también se envió hacia otros países pulpa de mango aséptica, piña MD2, lima persa y ají picante Chile Habanero, este último con una gran demanda en el mercado foráneo, lo que permitió duplicar lo planificado. También se incorporó un nuevo producto a la cartera de exportaciones, la sábila (Aloe vera), con excelentes propiedades curativas y para la producción de cosméticos.
Ante la compleja situación que vive la provincia y el país, DCballos también se insertó en el comercio electrónico, realizando ventas on line de productos como barras de guayaba, mermeladas y néctar aséptico de mango y guayaba y pasta y salsa condimentada de tomate.
Por otra parte, en aras de favorecer la sustitución de importaciones, respondiendo a los llamados de la dirección del país y del Ministerio de la Agricultura, la entidad potencia la comercialización con La Estancia, Cubacatering y la ZED.
Los grandes desafíos impuestos por la pandemia obligan a producir alimentos a corto plazo, incrementar las ventas a la población, buscar alternativas ante la escasez de envases y combustibles y aumentar las exportaciones.
La aparición del primer caso de Covid-19 de la provincia de Ciego de Ávila, en el poblado de Ceballos, puso a la mayor fuente de empleo de la localidad en alerta, obligándola a extremar las medidas preventivas y reordenar su estrategia productiva y de comercialización.
La Agroindustrial Ceballos, que en los primeros meses del año tuvo que sortear varios obstáculos para cumplir con su misión de producir, industrializar y vender sus productos, se enfocó en el incremento y diversificación de las ventas con destino a la población.
En este mercado superó los 32 millones de pesos durante el primer semestre del año, con gran variedad de alimentos frescos e industrializados, entre los cuales sobresalen los derivados del tomate, la papa prefrita, los jugos, mermeladas y dulces en almíbar, en diferentes formatos.
Además de las entregas a las empresas de Acopio y de Comercio, DCeballos potenció las ventas en los cuatro establecimientos para la comercialización con que cuenta en el territorio, dos en la capital provincial, uno en el municipio de Morón y otro en el Consejo Popular de Ceballos, al tiempo que acercó sus producciones a comunidades distantes de la localidad.
Para mantener la disponibilidad de mercancías, las unidades agrícola e industrial buscaron alternativas dirigidas a no afectar las campañas de tomate, guayaba, papa y mango, gestionando diversos tipos de recipientes para la recogida de los frutos y el envasado de las producciones.
Las 17 minindustrias y las casas de cultivo también se sumaron a la elaboración de alimentos con igual destino, mientras que las tres fincas de plantas medicinales continuaron aportando materia prima para la elaboración de medicamentos, usando medios alternativos para dar respuesta a la creciente demanda, al tiempo que extendía la comercialización de productos con propiedades curativas al mercado Frutávila.
A su vez, las granjas urbanas de Morón y Ciro Redondo, atendidas por la empresa, laboran en función de garantizar las entregas solicitadas a partir del fomento de la producción de hortalizas y vegetales en organopónicos y patios familiares.
Con este fin se han incrementado las tierras cultivables, se realizan intercambios con los productores de cada localidad y se fomenta el empleo de los abonos orgánicos, además de continuar potenciando el intercalamiento de los cultivos.
DCballos no se detuvo ante las limitaciones con el combustible, los insumos, o fertilizantes, por eso puso a prueba las potencialidades de sus cinco centros de materia orgánica, donde se elabora humus de lombriz líquido y sólido, del Centro de Reproducción de Entomófagos y Entomopatógenos y en el empleo de la tracción animal para el traslado de mercancías e insumos, cerrando el semestre con ventas netas superiores a los 190 millones de pesos.
