Los consumidores de bebidas espirituosas en Estados Unidos consideran un fiasco la comercialización en ese país de un ron que no reúne los patrones de calidad del verdadero Havana Club, revelaron encuestas realizadas en diferentes momentos.
Sin embargo, a pesar de esa verdad incuestionable que hoy identifica al genuino añejo cubano en mercados de más de 120 países, una Corte de Apelaciones estadounidense del tercer circuito acaba de negar a Pernod Ricard el derecho a usar el nombre de la legítima marca cubana en el mercado del país norteño.
El grupo francés de bebidas y licores, distribuidor exclusivo en el mundo de todos los añejos de Havana Club, luego de conocer la controvertida decisión, informó que seguirá su lucha por impedir la usurpación del nombre del ron cubano por parte de la firma Bacardí en aquel territorio.
El gigante galo, colíder mundial con un volumen de negocios de 7 081 millones de euros en el período 2009-2010, se comprometió a continuar su batalla para evitar la explotación indebida del nombre de Havana Club. En un comunicado entregado a Prensa Latina, Pernod Ricard lamentó que la Corte de Filadelfia desestime los sondeos de opinión.
Ian FitzSimons, director jurídico del citado grupo, recalcó que discrepa del dictamen emitido por esa Corte, que tolera la circulación de un ron con etiqueta "Havana" sin vínculo alguno con Cuba. "Estamos determinados, subrayó, a insistir en la disputa judicial para lograr una competencia en condiciones reales de igualdad en el mercado estadounidense, donde el registro de Havana Club se remonta a 1976".
La firma gala resaltó que desde hace 15 años, millones de cajas del auténtico ron cubano son comercializadas fuera de Estados Unidos con el nombre de Havana Club por una joint venture de Pernod Ricard y la Corporación Cuba Ron.
“No podemos vender en territorio estadounidense en razón del embargo (bloqueo) impuesto a la Isla a todos los productos cubanos”, acotó FitzSimons, y subrayó que la bebida se vende en más de 120 países.
El Órgano de Solución de Diferencias (OSD) de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en Ginebra desde 2002 considera inaceptable la Sección 211 de Washington que ampara a Bacardí en la usurpación de marcas (Havana Club).
Ley condenada por la OMC
También el 29 de marzo último, un fallo judicial emitido entonces por la Corte Federal de Apelaciones de Washington DC, con dos votos a favor y uno en contra, dio la razón al Departamento del Tesoro, que en 2006 no renovó la licencia comercial a la compañía francesa, en virtud de una ley de 1998 que prohibió la renovación de ciertas marcas comerciales cubanas.
Los sellos comerciales de esta nación caribeña han estado inscritos en Estados Unidos en previsión de la terminación del irracional bloqueo norteamericano contra la Isla, y por la misma razón las compañías estadounidenses inscriben sus marcas comerciales en la Mayor de las Antillas a pesar de que el cerco económico estadounidense desde hace casi 50 años imposibilita el comercio entre ambos países.
En esa ocasión la compañía gala se quejó mediante un comunicado que la decisión se ha basado en la llamada sección 211 de la ley comercial estadounidense que desconoce el derecho al uso de una marca utilizada por un comercio confiscado tras la Revolución cubana.
En 1998, el Congreso de EE.UU. aprobó una legislación que hizo inaplicables en su territorio las marcas comerciales cubanas. La ley, conocida como Sección 211, se ha aplicado a la marca Havana Club. La OMC ha dicho desde 2001 que la ley viola tratados internacionales, y ha exigido que se cambie.
Esta legislación, subraya el texto de Pernod Ricard, ha sido condenada por la Organización Mundial de Comercio, la Cámara de Comercio estadounidense, así como por la Unión Europea, que considera que es una violación del acuerdo internacional que protege los registros de marcas y una discriminación contra Cuba como país exportador”.
El contencioso también se ha disputado en los tribunales de España, donde el Tribunal Supremo, la instancia máxima de la Justicia española, reconoció la propiedad de la marca Havana Club a favor de Pernod Ricard y Cuba Ron.
FitzSimons recordó que Cubaexport registró desde 1976 la marca Havana Club en Estados Unidos, y afirmó que es sorprendente que una corte estadounidense permita que un derecho de propiedad intelectual sea destruido retroactivamente rechazando la renovación de su marca registrada.
La injusta decisión adoptada por esa instancia judicial no afecta la comercialización internacional de Havana Club. Sus ventas alcanzaron 3,5 millones de cajas de nueve litros en el año fiscal finalizado en junio de 2010, volumen que la ubican como "la segunda marca de ron en el mundo", excluyendo desde luego el mercado de EE.UU. por las leyes del bloqueo contra Cuba.
Informes estadísticos del Grupo Pernod Ricard sitúan la gama de Havana Club entre las marcas de licores de más rápido crecimiento, con dos dígitos cada año desde la constitución en 1993 de una empresa mixta entre Corporación Cuba Ron y el Grupo Pernod Ricard.
Buen ritmo en ventas
No obstante las patrañas que se confabulan en territorio estadounidense contra Cuba y su genuino producto, directivos de la empresa cubano-francesa Havana Club Internacional S.A. (HCI) auguran mejores resultados para el cierre de 2011, luego de vender el pasado año unas 3,8 millones de cajas de ron (de nueve litros), y mantenerse en el actual período un buen ritmo de facturación.
Desde su fundación la firma creció de forma sostenida pero la crisis económica mundial, desde 2009, hizo que por primera vez en la historia Havana Club enfrentara una ligera, baja en sus volúmenes de ventas; ligera porque de 3,4 millones de cajas pasó a 3,3 millones, por caída insignificante, aseguraron recientemente a Opciones representantes de la firma.
Marc Beuve-Mery, director general de HCI, en entrevista exclusiva para este semanario, destacó que "fue excepcional la mejora de las ventas en el año 2010, porque se dieron nuevamente las condiciones favorables en el mercado y nuestra marca es fuerte; entonces la recuperación resultó espectacular. La facturación de 3,8 millones de cajas nos permitió implantar el pasado año un nuevo récord, con lo cual alcanzamos la posición 22 a nivel mundial. De esta forma conseguimos un excelente año".
Agregó que de esa forma y en relación con los demás competidores "resistimos mejor y ganamos en la clasificación mundial de los espirituosos que se comercializan en el planeta. Eso indicaba que habíamos logrado relativamente mejor resultado que los demás", acotó.