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18 de Abril  2024 

Caguanes enamora a primera vista

El Parque Nacional Caguanes, una joya de la naturaleza en la Reserva de la Biosfera Bahía de Buenavista, atesora maravillas espeleo-arqueológicas, que lo convierten en lugar de referencia nacional


Miércoles 14 de Marzo de 2018 | 12:00:00 AM 

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Si hay un sitio que enamora a primera vista por sus bellezas naturales es el Parque Nacional Caguanes, una joya de la naturaleza que pertenece a la Reserva de la Biosfera Bahía de Buenavista y que reúne huellas antiquísimas de aborígenes, trampas térmicas y acantilados.

Es así que esta área atesora maravillas espeleo-arqueológicas, por lo que se ha convertido en un lugar de referencia en Cuba, si se desea conocer de cerca lo que ofrece el ecosistema antillano y cómo, en un mismo lugar, se pueden observar diferentes paisajes.

No hay quien ponga los pies en la región, ubicada al norte de la provincia de Sancti Spíritus, y permanezca impasible frente al sistema de colinas residuales que da origen al grupo de cayos, donde la disolución cársica ha generado numerosas cavernas de las cuales se han reportado más de 70.

En algunas de esas el derrumbe de sus techos ha creado múltiples dolinas y salones, cuyo panorama impresiona a los visitantes que deciden ir hasta allí mediante las modalidades turísticas que ofrece el parque para apreciarlo.

El Sendero espeleo-arqueológico Las maravillas que atesora Caguanes permite acercarse a tres de las cuevas más representativas del área: Humboldt, Los Chivos y Ramos, donde en cada una se podrán observar singularidades de este refugio natural espirituano.

Y es que en el interior de estas grutas se aprecian formaciones de estalactitas, estalagmitas, mantos, gours, columnas, electitas, perlas, o los llamados espaguetis.

Comunes en estos sitios y que hacen único el paraje cavernario, el sinnúmero de figuras rocosas creadas por el capricho de la naturaleza alucinan al espectador, quien, de acuerdo con su imaginación, puede atribuirle infinitas formas.

Los Chivos, por ejemplo, impresionan por sus múltiples dolinas y claraboyas, donde se ha creado una combinación perfecta entre espeleología y naturaleza.

Se dice que en esa el senderista se queda estupefacto al observar cómo se filtran los rayos del sol, sobre todo en las primeras horas del mediodía y la tarde.

Ramos, en cambio, alberga la mayor cantidad de pictografías y es llamada La catedral del arte rupestre cubano por atesorar 81 representaciones y un petroglifo combinado con una pictografía.

Mientras, pinturas negras o rojas se pueden ver en esta opción de ecoturismo, las cuales no se encuentran retocadas, característica que le otorga mayor valor, ya que el turista observa con exactitud lo que el aborigen cubano plasmó en su visión cosmo-religiosa.

En tanto, la plataforma costera acoge fantásticos arcos pedregosos sobre las aguas del mar, así como el sistema de cayos (13 en total); de ahí que el recorrido náutico constituya uno de los productos más demandados por los visitantes.

Considerados únicos en el archipiélago Sabana-Camagüey y en Cuba por el naturalista Antonio Núñez Jiménez –denominado el cuarto descubridor de la Isla–, los cayos brindan una vista insuperable que en muchas ocasiones son fotografiados para dar a conocer la belleza natural de la Mayor de las Antillas.

En este recorrido, el vacacionista tiene la posibilidad de zarpar desde playa Vitoria, de un espigón construido a finales del siglo XIX y utilizado en ese entonces para exportar el azúcar cubana, además de pasear por las aguas someras de la Bahía y disfrutar de las aves marinas y migratorias.

Considerados los cayos unos verdaderos jardines de la naturaleza, en esos habitan la iguana cubana, una especie carismática con cierto grado de peligro de extinción y que afortunadamente aquí gozan de buena salud.

Sin necesidad de transitar los islotes, el turista puede observar las bocas marinas de las cuevas, las cuales son vestigio de que hace miles de años diversas culturas aborígenes las convirtieron en sitios funerarios, de rituales, habitacionales, o fueron la combinación de todos estos.

Varias de las atracciones de estas aguas, vírgenes y naturales, son que en ocasiones hay posibilidades de ver manadas de delfines pico de botella o tonina, que interactúan con las personas y muestran sus acrobacias.

La mayor de las serpientes cubanas (el majá de Santamaría); la grulla cubana, única de las Américas que vive permanentemente fuera de la tierra firme; el segundo más pequeño de los quirópteros (murciélago Mariposa); y el mayor (murciélago pescador), son otras de las maravillas que posee el parque.

Esta zona constituye un bien preciado donde se reproducen y viven especies en peligro de extinción de la flora y fauna, expresión del endemismo nacional, regional y local.

De esos tesoros ambientales, de la historia y la cultura cubanas, el excursionista puede conocer si decide llegar hasta este lugar, donde se puede disfrutar además de un buen chapuzón en sus aguas vírgenes.

Emoción y paz espiritual son sentimientos garantizados en Caguanes, donde se conocen los secretos de vivir en armonía con la naturaleza y las bondades de esta. (Tania Rendón Portelles)

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