Autoridades del país y el territorio se alistan hoy para acceder vía aérea al poblado capital del municipio de Maisí para apoyar en las labores de recuperación e intentar restablecer las comunicaciones terrestres tras el paso del huracán . La reparación de los puentes y tramos de vía averiados impiden la llegada al territorio de fuerzas de apoyo y recursos para los damnificados, de ahí la prioridad de arreglarlas lo más pronto posible, declaró el viceministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias Ramón Espinosa, en un intercambio con el Consejo de Defensa Municipal.
Sólo hasta un corto tramo de este municipio del extremo oriente cubano puede accederse hasta ahora, sorteando ríos crecidos, postes y árboles derrumbados, cables caídos y otros obstáculos, arrastrados hacia la carretera por la fuerza de los vientos o la furia del mar.

Una anciana de 95 años, que contemplaba desde un tronco caído el derrumbe total de su vivienda, confesó a Prensa Latina: 'yo recuerdo cuando pasó el Flora, también fue muy fuerte, pero nada como esto, pero que vamos a hacer, la vida sigue y no recuerdo que el estado cubano haya abandonado a nadie'.

Casas sin techo, paredes destruidas, ropas y objetos secándose al sol, es una imagen que impacta a aquellos que por cuestiones de trabajo se aventuran a atravesar los 50 kilómetros que los separan del poblado de Boca de Jauco, único lugar al que puede accederse por carretera dentro de Maisí.

Imágenes devastadoras que por sí solas muestran la magnitud de las afectaciones que provocó el huracán Matthew durante su entrada y estancia en esta parte del archipiélago cubano.

Al mismo tiempo, impacta el optimismo y la solidaridad de los damnificados, entre quienes una fase de consuelo predomina: 'periodista lo más importante es que estamos vivos', y es que pese a la magnitud del huracán no hubo que lamentar pérdidas humanas. (Tomado de granma.cu)