Los precios del petróleo cayeron casi 2 %, debido a las señales de que se está extendiendo una desaceleración económica en China, lo que agudiza las preocupaciones sobre el crecimiento mundial y la demanda de combustible.

Las sombrías noticias de la segunda economía más grande del mundo y del principal importador de petróleo han hecho caer los mercados financieros de toda Asia.

Los futuros internacionales del petróleo Brent cayeron 1,23 dólares, o 1,96 %, hasta situarse en 61,51 dólares el barril. Los futuros de crudo del West Texas Intermediate (WTI) bajaron  a 52,80 dólares.

China registró el lunes pasado el crecimiento económico anual más bajo en casi 30 años y su planificador estatal advirtió que la caída de los pedidos de fábrica apunta a un nuevo descenso de la actividad y a pérdidas de empleo.

Mientras que las importaciones de petróleo de China han desafiado hasta ahora la desaceleración económica, alcanzando un récord de más de 10 millones de barriles por día (bpd) a finales de 2018, muchos analistas creen que el país ha alcanzado su pico de crecimiento energético, con su demanda a punto de disminuir.

“Es probable que la desaceleración de la actividad manufacturera en China esté afectando a la demanda”, dijo la empresa de corretaje de petroleros Eastport, con sede en Singapur, y agregó que la desaceleración industrial tiende a ser uno de los principales indicadores que alimentan gradualmente la menor demanda de productos petroleros embarcados.

En un signo de la creciente debilidad económica, el crecimiento de la economía orientada a las exportaciones de Corea del Sur se desaceleró a un mínimo en seis años en 2018, según los datos oficiales. (portafolio.com)