Gladys Bejerano Portela, contralora general de la República. Autor: ACN Publicado: 22/09/2022 | 11:45 am
La XIV Comprobación Nacional al Control Interno dio inicio esta semana en todo el país y se extenderá hasta el 31 de octubre, con el propósito de verificar in situ cómo la empresa estatal socialista implementa las 43 medidas dirigidas a su perfeccionamiento y consolidación, cual protagonista en la producción de bienes y servicios, que redunden en una mejor calidad de vida de la población.
Según informó a la prensa Gladys Bejerano Portela, contralora general de la República, la llamada auditoría de cumplimiento abarcará a 305 entidades , ubicadas en el 51,2 % de los municipios del territorio nacional, y representativas de los principales programas que hoy se despliegan.
Intervienen en el mayor ejercicio de fiscalización anual, 2 200 auditores, supervisores, expertos de organismos, más de 850 estudiantes universitarios y 101 expertos de la Oficina Nacional de Normalización y la Oficina Nacional de Inspección del Trabajo, de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba, de la Unión de Juristas y la Central de Trabajadores de Cuba.
Ya los puestos de mando provinciales comienzan a recibir los reportes de los grupos de auditoría asignados a cada entidad, donde fueron recibidos por sus administraciones, organizaciones sindicales y políticas, con la certeza de que esta acción hará más eficiente su gestión y contribuirá con creces al desarrollo del país.
Bejerano Portela exaltó la abnegada labor de esos profesionales y de todos los integrantes del sistema nacional de auditoría, al insistir en el reconocimiento social que merecen por enfrentar los actuales desafíos económicos y problemas energéticos del país, como un solo equipo, en el empeño de aportar en el perfeccionamiento de la empresa estatal socialista.
Comentó la Contralora General que es prácticamente una investigación integral lo que van a asumir con el objetivo de impulsar el perfeccionamiento de la Empresa Estatal Socialista y asegurar que las medidas establecidas se apliquen correctamente en cada caso y con eficiencia.
En particular, precisó que hay que profundizar en las empresas que han tenido pérdidas en su gestión, estudiar las causas y, sobre todo, buscar solución. Señaló que se debe trabajar en cada auditoría ajustados a los horarios de corte de energía, optimizando los recursos disponibles, demostrando que sí se puede y buscando alternativas.
“Mientras no logremos que las empresas estatales avancen no va a avanzar el país”, enfatizó tras subrayar que, por eso, la comprobación debe detectar los problemas y darles solución con el aporte científico que cada caso requiera. Para esto instó a cada equipo de auditores a analizar los problemas de su territorio y controlar en cada centro el tema priorizado y los complementarios que la investigación sugiera.
Orientó además, a realizar las discusiones previas con tiempo para que tengan oportunidad de debatir tanto el auditado como el auditor, y aclaró que todo debe quedar reflejado en los documentos. Lo ideal es que se supervise cada auditoría en sus tres etapas, antes de la reunión final, asegurando la calidad del proceso y sus resultados.
Se refirió al abnegado trabajo de los auditores y supervisores, y pidió la atención a los estudiantes universitarios cuyo aporte es muy significativo. Remarcó el carácter preventivo y educativo de este gran ejercicio de control, efectuado en momentos en que el país enfrenta serias dificultades económicas y energéticas en particular.
Prioridades económicas en la agenda
Las empresas, unidades empresariales de base y organizaciones superiores de dirección empresarial seleccionadas en esa muestra están insertadas en la producción de alimentos y en el turismo, algunas tienen pérdidas y exceso de utilidades, y otras son importadoras y exportadoras que sustituyen importaciones.
En cuanto a las actividades, un grupo se dedica a la agricultura, ganadería, caza y silvicultura, por lo cual en estas se comprobará también el cumplimiento de las 63 medidas dirigidas a transformar ese sector; mientras las otras intervienen en la pesca, las industrias manufactureras, la construcción, el comercio, la reparación de efectos personales, el transporte, el almacenamiento y las comunicaciones, más otras que son hoteles y restaurantes.
Darlam Dalmau Palomino, vicecontralor general, resumió el proceso en el que intervendrán 2 157 personas, entre ellos, 1 918 auditores, en tanto, desde los puestos de mando en las contralorías provinciales se dará seguimiento al ejercicio, con el apoyo de especialistas de diversos organismos.
En todos los territorios, excepto Cienfuegos, también se incorporaron estudiantes universitarios, de carreras como Contabilidad, Derecho, Ingeniería Industrial, de las de ciclo corto en Auditoría, Economía, Informática, Ciencias Agropecuarias, Agronomía, Química y Periodismo.
“Su selección y preparación, al igual que la de los auditores, supervisores y demás especialistas ha sido vital en pos de que el ejercicio cumpla sus propósito”, expresó el funcionario de la Contraloría General de la República, y puntualizó que en las entidades escogidas se comprobará el cumplimiento de los planes, la calidad, la contratación económica, el pago de salarios, la distribución de utilidades y el control del combustible y demás recursos, entre otros asuntos, siempre en apego a la legalidad, a lo que establecen las normas y regulaciones en vigor.
Apuntó que la comprobación al control interno se realiza con un enfoque de proceso, y subrayó que las contralorías provinciales podrán decidir la evaluación en las auditorías de los temas complementarios que resulten necesarios, incluyendo con carácter obligatorio el vinculado al control y uso del combustible.
El período a verificar será el primer semestre del año y si se conociera de presuntos hechos delictivos u otros significativos, serán informados de inmediato al puesto de mando provincial, quien orientará los pasos a seguir en cada caso.
Como prioridad de las auditorías se señala el control del cumplimiento de las 43 normativas aprobadas para el sistema empresarial estatal cubano, la gestión de las empresas que producen bienes y servicios para la exportación, así como en la sustitución de importaciones, las indicaciones generales para verificar las asignaciones de liquidez, el empleo del combustible y el uso del transporte, entre otras temáticas.
Se informó que los grupos de auditoría podrán solicitar a los puestos de mando provinciales, de acuerdo con sus evaluaciones iniciales, la ejecución simultánea de temas complementarios que tratan sobre los procesos de contratación económica; el estado de las cuentas por cobrar y pagar, su documentación y fiabilidad; el control del pago de nómina de acuerdo con las escalas, tarifas y los sistemas de pagos aprobados a los trabajadores y el control y uso de los inventarios.
Se añaden en la lista la licencia de operación de transporte, seguridad vial y carta porte; los asuntos opcionales de efectivo en caja y banco; activos fijos tangibles; control de los procesos inversionistas; los movimientos organizativos de entidades, y la entrega y recepción de los cargos.
Los grupos de auditoría en las Organizaciones Superiores de Dirección Empresarial (OSDE) deberán resumir los resultados de la comprobación en sus entidades a partir del 20 de octubre y las empresas previamente resumirán los correspondientes a sus Unidades Empresariales de Base (UEB) en igual fecha, con vistas a poder resumirlo todo en el puesto de mando nacional y tener listo el informe que se presentará al Gobierno.
Bejerano Portela precisó que el informe final de cada auditoría al consejo de dirección de la entidad y a la asamblea de trabajadores hay que realizarlo con la transparencia que caracteriza este proceso, y promover el debate con los colectivos laborales con el interés supremo de mejorar la empresa estatal socialista, sin lo cual no podremos avanzar en el desarrollo nacional en beneficio de la población.
Alertó de que si algo no se cumple o hay pérdidas es importante saber por qué, analizar qué se ha hecho para resolver esa situación y dónde están los problemas y deficiencias que obstaculizan su cumplimiento; hay que decirlo y discutirlo constructivamente, como revolucionarios, puntualizó la Contralora General.
