Autor: Internet Publicado: 21/06/2021 | 09:50 pm
Un iceberg, describe el diccionario de la lengua española, es una “gran masa de hielo flotante, desgajada del polo, que sobresale en parte de la superficie del mar”. Otras definiciones indican que cuando colisionan contra embarcaciones pueden destruir parte de la estructura de estas por lo que constituyen un gran peligro para las embarcaciones que navegan por los océanos. En psicología, la Teoría del iceberg de Hemingway se refiere a casos en los que un individuo solo presta atención a aquello que es visible a simple vista quedando inadvertido el resto.
Así es el bloqueo económico, comercial y financiero que impone Estados Unidos a Cuba; los ejemplos sobran.
Con la facultad concedida de realizar operaciones de comercio exterior, a partir de 2018, la empresa Frutas Selectas dedicó parte de sus acciones al aprovisionamiento a los cruceros y a los barcos de recreo que entraban a los puertos de La Habana, Cienfuegos y Santiago de Cuba. Era un negocio de ganar y ganar para todos.
Sin embargo, al saliente inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, no le pareció bien y en sus muchos intentos por apretarle la tuerca a la economía cubana prohibió a partir de junio de 2019 las paradas en Cuba de esas megaembarcaciones turísticas. Implicó perder para todos: los viajeros, las cuatro compañías estadounidenses de cruceros que operaban en el archipiélago y las empresas proveedoras de alimentos.
“Estamos obligados a cancelar nuestras visitas a La Habana. Pedimos disculpas a nuestros huéspedes por este cambio inesperado”, advirtió entonces a sus clientes la empresa Carnival, mientras la Norwegian Cruise Line tuvo que deshabilitar la opción Cuba de la lista de ofertas de su sitio web.
Al respecto, la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA, por sus siglas en inglés) consideró que estos cambios afectaban “a casi 800 000 reservas de pasajeros que actualmente están programadas o ya están en curso”. Y agregó: “sin previo aviso, los miembros de CLIA Cruise Line se ven obligados a eliminar todos los destinos de Cuba de los itinerarios con vigencia inmediata. Las reservas de pasajeros se hicieron bajo una licencia general previamente emitida por el gobierno de los Estados Unidos que autorizaba a las personas a visitar la Mayor de las Antillas. Estas restricciones de viaje, efectivamente, hacen que sea ilegal cruzar a Cuba desde los Estados Unidos”.
Para Frutas Selectas, una empresa del sistema de la agricultura, indica su director general Juan Carlos Rodríguez Portuondo, eso ha representado limitarse solo al abastecimiento de barcos mercantes, con la consiguiente contracción de sus operaciones e ingresos.
Real y omnipresente
Hace unos días, en un foro virtual internacional organizado por el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), el viceministro de la agricultura, Maury Hechavarría Bermúdez, denunció de los daños que ha causado a este sector durante el último año el bloqueo económico y financiero que por casi seis décadas mantiene Estados Unidos contra Cuba.
En los últimos años y recrudecido con el gobierno del saliente presidente estadounidense, Donald Trump, es bloqueo es real y constituye el principal obstáculo para el desarrollo agrícola en Cuba, enfatizó Hechavarría Bermúdez.
“Este recrudecimiento del bloqueo -indicó- ha ocasionado impactos negativos para todo el sistema de la agricultura, en especial para el sector empresarial, las cooperativas agropecuarias y productores y, por consiguiente, ha ocasionado afectaciones en la producción de alimentos para la población”.
Las medidas impuestas por el bloqueo, agregó el Viceministro, dificultan además el cumplimiento de las metas y Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), específicamente el número dos o Hambre cero, para el cual se habían proyectado indicadores y metas como duplicar la productividad agrícola y los ingresos de los productores de alimentos en pequeña escala, asegurar la sostenibilidad de los sistemas de producción de alimentos y aplicar prácticas agrícolas resilientes, que aumenten la productividad y la producción.
Según dijo el Vicetitular, Cuba había concebido el incremento de las inversiones, mediante una mayor cooperación internacional en la infraestructura rural, la investigación agrícola, los servicios de extensión y el desarrollo tecnológico, entre otros, a fin de mejorar la capacidad de la producción agrícola en los países en desarrollo. Todo esto ha sido frustrado por las medidas unilaterales de Washington.
Los números hablan
El pasado año “se registra una afectación al sistema de la agricultura que alcanza unos 350 598 937 dólares, incidiendo en eso los ingresos dejados de recibir por exportaciones de bienes y servicios por 181 458 750 dólares”. Según dijo, este es uno de los elementos que más inciden, toda vez que las exportaciones en el sistema de la agricultura hoy no se pueden realizar en el mercado estadounidense, donde tendría un grupo de beneficios para el sistema de la agricultura, toda vez que existe cercanía y es más competitivo en precios, entre otros factores.
Hechavarría Bermúdez señaló asímismo que son importantes también las afectaciones por la reubicación geográfica del comercio, que alcanzan un valor de 39 197 939 dólares. “Hemos tenido que realizar las principales operaciones de comercio exterior en lugares muy lejanos como Europa, India, China, y otros países muy distantes, por no poder acceder al mercado de Estados Unidos”.
El país sufrió también afectaciones en la producción y los servicios, los cuales alcanzan un valor de 35 720 949 dólares, como consecuencia de las medidas impuestas de prohibir el suministro de combustible a Cuba. “Este es uno de los insumos vitales para las producciones agrícolas y no hemos podido contar con eso”. A esto se unen las sanciones impuestas con los buques para las operaciones de comercio, que han limitado el acceso a los insumos para el desarrollo de las producciones agrícolas.
De acuerdo con el Viceministro de la Agricultura otro grupo de efectos tienen que ver con afectaciones monetarias financieras, valoradas en 19 154 367 dólares debido a la persecución financiera del gobierno de los Estados Unidos a las transacciones que realiza Cuba, imposibilitando que los ingresos de las exportaciones cubanas puedan entrar al país, mientras que entidades que operan con la Isla reciben sanciones, lo que resulta un impacto negativo muy fuerte para el desarrollo de la agricultura.
Otra de las aristas de este multidimensional asunto es el bloqueo tecnológico, que generó perjuicios por un valor de 75 066 032 dólares, al no poder acceder a la tecnología estadounidense por la imposibilidad de acceder a ese mercado, “aun cuando existen empresarios y productores agrícolas de Estados Unidos que han expresado su voluntad de comercio con la agricultura en Cuba”.
Comercio limitado
Entre los ejemplos citados por Hechavarría Bermúdez de las exportaciones que Cuba no puede realizar al estar prohibido el comercio se encuentran el tabaco, principal rubro exportable de la agricultura cubana. “No hemos podido insertarnos, en cambio, antes de 1962, era el primer mercado que tenía el tabaco”, dijo.
Se incluyen también en ese listado las frutas frescas industrializadas y el carbón vegetal. Este último “es uno de los productos que se comercializa en muchos países, en Europa, Medio Oriente, muy distantes de Cuba, y no podemos acceder al mercado estadounidense”, incluso cuando pagan precios más competitivos.
Otros ejemplos son la miel de abejas y el café, que deben ser comercializados en naciones lejanas de Europa y Asia. Según el directivo, está también “Labiofam, que elabora un producto como el Vidatox 30 CH, un homeopático complementario para el tratamiento del cáncer, que pudiera exportarse a Estados Unidos, un país con alta incidencia de esa enfermedad. En cambio, ellos limitan que las personas puedan acceder a estos medicamentos, pues no permiten que se comercialicen”.
“La agricultura tiene muchas posibilidades por su amplio sistema empresarial y un sector cooperativo y productores que respaldan las políticas del país, pero por todas estas decisiones ha sido muy complejo lograr los niveles de producción que satisfagan las demandas de la producción de alimentos en Cuba. Por tanto, una vez más, denunciamos y reclamamos el cese del bloqueo impuesto por el gobierno de Estados Unidos para el desarrollo del país y de la agricultura”, subrayó.
