Trabajo, creación, compromiso, seguridad y fe en la victoria fueron palabras mencionadas por el ministro de Economía y Planificación (MEP), Alejandro Gil Fernández, como armas necesarias en la Cuba actual, si de crecimiento se trata.

El titular expresó su convicción durante el tercer período ordinario de Sesiones de la 9na. Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular,  al compartir con los diputados una síntesis sobre lo ejecutado en la economía de la Isla en el primer semestre de 2019, y sobre las acciones fundamentales en las que se debe trabajar en el segundo semestre del presente año, así como lo relacionado con la elaboración del plan con vistas a 2020.

Al abordar el contexto económico internacional, Gil Fernández informó que se estima un crecimiento de la economía mundial del 3,3 %, cifra inferior al 3,7 % de lo proyectado en el mes de diciembre del pasado año. En el caso específico de América Latina y el Caribe, el crecimiento que se proyecta es del 1,4 %, cifra inferior al 2,2 que fue proyectado con anterioridad.

Sobre nuestra economía, el Ministro manifestó que ha estado en el primer semestre de este año enfrentando niveles de restricciones financieras; limitaciones para acceso a los financiamientos; endurecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero; escasez de ofertas, fundamentalmente en los primeros meses del año, y sobre todo en algunos productos de línea económica y de demanda de la población.

El escenario Cuba adentro también ha estado signado, como explicó el titular, por el incumplimiento de los ingresos previstos por exportaciones (fundamentalmente en el turismo y en la producción del níquel); por la restricción de los portadores energéticos; y por el diseño de medidas para impulsar la economía.

En el caso del níquel, argumentó, el impacto fundamental ha estado en el primer semestre del año, y no precisamente en la producción física, con la cual se ha estado cumpliendo, sino en los precios que han descendido considerablemente, por lo cual el país ha dejado de tener ingresos.

Sobre la restricción en los portadores energéticos, reflexionó que tal situación obliga a reforzar su control para garantizar que el país disponga de esos donde más los necesita, especialmente en las producciones que tienen vínculos directos con las necesidades de la población.

Acerca de la información oficial del cierre de 2018, Gil Fernández enunció que se alcanzó un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), a precios constantes, del 2,2 %, cifra superior al 1,2 informado como estimado en diciembre de 2018.

Según detalló, crecieron por encima de lo estimado los sectores de la Construcción (de -2,2 % a 9,3 %), de Salud Pública (de 1,3 % a 3 %), y de la agricultura, ganadería y silvicultura (de -4,9 % a 2,6 %).

Signos de este año

En cuanto al comportamiento de la economía de Cuba en el primer semestre de 2019, el titular del MEP afirmó que se han sobrecumplido las exportaciones de servicios médicos, tabaco, ron, langosta, jugos concentrados y frutas frescas, así como carbón, entre otras. No se alcanzaron, sin embargo, los niveles previstos para el turismo, el níquel y las transportaciones aéreas. Y en cuanto al azúcar, aunque no se cumplió el plan físico sí se llegó a la meta en valores por haberse obtenido precios superiores a lo planificado.

El plan de importaciones, en el primer semestre de 2019, se sobrecumplió atendiendo al arribo al país de mercancías contratadas el año anterior, fundamentalmente equipos.  Por otra parte, se han estabilizado las importaciones de alimento animal (maíz, harina de soya, pienso de inicio), y de alimento humano.

Sobre las acciones emprendidas para detener la espiral de endeudamiento, Gil Fernández dijo: “Nos propusimos que el plan de 2019 no incrementara los niveles de endeudamiento del país (…), y para eso establecimos premisas fundamentales como trabajar la cuenta corriente sin déficit, o sea, que tuviéramos un equilibrio entre los niveles de exportaciones e importaciones”.

De otro concepto crucial habló el Ministro: de que el país produzca todo lo posible en aras de disminuir importaciones. Es una estrategia que debe mantenerse. Todo lo que, por ejemplo, sea arroz, maíz, leche, constituyen producciones capaces de sustituir, de manera directa, lo que hoy se importa.

Sobre las producciones nacionales en el primer semestre de 2019, Alejandro Gil enumeró la del petróleo equivalente, con el cual se sobrecumplió en 2,5 %; el arroz (se produjo el 92 % de lo planificado, que fueron 77 700 toneladas, y se sobrecumplieron las ventas liberadas en 7 000 toneladas); frijoles (de los que se produjeron 47 400 toneladas, para un 95 % del plan); harina de trigo (258 600 toneladas, para un 89 % del plan); maíz (12 100 toneladas, para un 98 % del plan); harina de soya (26 500 toneladas, para el 99 % de lo planificado); y huevos (895 millones, para un 99 % del plan).

En cuanto a la carne de cerdo, según informó, se entregaron a la industria 60 000 toneladas para un 98 % del plan; al tiempo que se obtuvieron 47 000 toneladas de carne bovina para el 92 % del plan. De leche fresca se produjeron 158 500 000 litros, cifra que representa 13 100 000 litros por encima del plan.

La producción de acero, fueron 26 840 toneladas, para un 75 % de cumplimiento; y la de cemento, 825 000 toneladas para un 97,6 % del plan. Y al describir el comportamiento de la zafra azucarera en el primer semestre de 2019, el titular habló de una contienda que creció en un 31 % con respecto al año anterior, aunque se produjeron 191 200 toneladas por debajo el plan.

De inversiones y otros indicadores

En lo que al plan de inversiones desagregado respecta, según explicó el titular del MEP, se trabaja en su control para que se materialice del todo en el segundo semestre.

Ya puede hablarse de inversiones importantes en explotación como la Terminal Multipropósito de Santiago de Cuba; el Programa de reparación capital de tanques de Cupet; las labores en el sector hidráulico; nuevos parques solares fotovoltaicos; la incorporación a la economía de 2 340 equipos automotores; así como la puesta en marcha de las inversiones de reconversión tecnológica de cloro sosa y la Fábrica de Fertilizantes NPK.

La participación de la inversión extranjera y el programa de la vivienda también formaron parte de la exposición del titular del MEP. Sobre el segundo, pudo saberse que fueron terminadas 15 748 (6 321 por el sector estatal, y 9 427 por esfuerzo propio).

En cuanto a la circulación mercantil minorista, el plan del primer semestre del presente año se cumplió en un 95,%, y se trabaja, aseguró Gil Fernández, en el aseguramiento del plan del segundo semestre.

El tema del sistema empresarial motivó la siguiente reflexión en el titular del MEP, a partir de que en algunas empresas se reportan altos sobrecumplimientos de las utilidades: es preciso, dijo, que se debata ampliamente en las estructuras empresariales cuáles son las prioridades de le economía (exportar más, importar menos, tenerle más amor a lo que se produce en Cuba, producción de alimentos, producción industrial); estamos buscando en esta etapa que se discuta a profundidad cuáles son las potencialidades de las empresas (para que esas posibilidades se ajusten a planes más exactos).

Luego de mencionar medidas en la economía -como que el salario medio se incrementó en un 1,1 %; se incrementó en el sector presupuestado; y se diseñaron modificaciones para el pago del salario en el sector empresarial, las cuales se aplicarán en 2020-, Alejandro Gil explicó que con miras al plan de la economía del próximo año se priorizarán actividades vinculadas con la producción de alimentos, programas de la vivienda, transporte, informatización y medicamentos; financiamiento a la industria nacional, mantener la restricción del endeudamiento, y garantizar el crecimiento de las inversiones. (Tomado de Juventud Rebelde)