Martes
16 de Abril  2024 

Cienfuegos, un sitio para descubrir

Si hoy es mayormente un sitio de tránsito, bien podría convertirse en el futuro en lugar de larga estancia


Jueves 11 de Mayo de 2017 | 12:00:00 AM 

Autor

Raquel Sierra

La ciudad bordea el mar. La amplia bahía de Jagua -con un área de 88 kilómetros cuadrados- , acompaña cada paso y como valor añadido, deja ver pequeños cayos a los que los lugareños acuden a bañarse apenas empieza a sentirse un poco de calor.  Incluso, cuando está un poco alejada, llama a su encuentro. Es  a su vez, playa, motivo de inspiración, vía de transporte y sitio para el atraque de veleros y cruceros.

En las tardes, la caída del sol puede ser perfecta desde el malecón. Por sobre las elevaciones del lado opuesto de la bahía, una bola de naranja ardiente desciende lentamente, quitando a su paso las nubes que impiden ver como se guarda hasta el otro día. Los reflejos en el agua son de colores intensos, con destellos. Cae despacio para que quienes llegaron casi tarde también tengan la oportunidad de asistir a su puesta y atraparlas con sus lentes.

Como toda ciudad que se respete, con subir por el Prado desde el  malecón y doblar a la izquierda se llega al parque, donde están muy próximos la iglesia, el teatro, el palacio de gobierno y  el museo.  La ciudad, la única fundada por los franceses en Cuba, en 1819, se precia de eso con su trazado, sus inmuebles y su estado, que llevó a la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, a convertirla en 2005 en la más joven de las villas cubanas declaradas Patrimonio de la Humanidad.

Vocación tridimensional

Con esos atractivos -y otros aun no mencionados hasta ahora-, no es de extrañar que esta ciudad ubicada a 232 kilómetros de La Habana atraiga a visitantes nacionales e internacionales.

“Cienfuegos es un polo turístico que, como sucede con otras ciudades patrimoniales como Trinidad y Camagüey, se caracteriza por tener un turismo de circuito. Tiene, sobre todo, una peculiaridad, su bahía, que la ha llevado a ser bautizada como la “perla del sur”, comenta a Opciones José Enrique González Garrido, delegado del Ministerio de Turismo (Mintur) en ese territorio.

A su juicio, “Cienfuegos puede considerarse como un turismo con vocación patrimonial-náutica, sin olvidar sus atractivos naturales, con amplias potencialidades que apenas estamos conformando como productos de turismo de naturaleza”.

Para el desarrollo turístico el territorio cuenta con hoteles a la orilla de la costa, cuyo atractivo principal es el disfrute del sol y la playa, entre esos Rancho Luna y Faro Luna, con las condiciones del mar características de la costa sur, e  integran el complejo homónimo, perteneciente a la cadena Gran Caribe.

Quienes prefieren la ciudad pueden optar por el hotel Jagua, la Casa Verde, Perla del Mar, Palacio Azul y Unión, estás cuatro últimas adscritas a la línea Hoteles Encanto (HE) y que conforman el complejo Jagua-Unión, operado también por el grupo Gran Caribe.

Existen otros alojamientos: Pasacaballos, Villa Yaguanabo y Punta la Cueva, bajo la administración del grupo Islazul, mientras que la Villa Guajimico, adscrita al Grupo Campismo Popular, recibe visitantes internacionales y nacionales. Esta entidad dispone también de los campismos Jagua, Playa Inglés y Cinco Azúcar.

De acuerdo con González, la actividad extrahotelera la desarrolla la compañía Palmares, que cuenta entre sus instalaciones con el Club Cienfuegos, el bar-restaurante Palatino, el centro Benny Moré y el restaurante El Nicho, en la zona de saltos de agua de igual nombre que sirven de espacio para el disfrute de la estancia.

Mercados y números

“Entre los principales mercados de este territorio se encuentran Canadá, Alemania, Estados Unidos, Francia y España, que crecen en relación con 2016. Al ser un turismo de circuito, la estancia promedio de los visitantes es de 1,8 días”, apunta el delegado. Potenciar ofertas de recorridos que mezclen lo histórico y patrimonial con lo natural y mayores propuestas para la permanencia, podrían convertir a Cienfuegos en mucho más que un sitio obligado de tránsito.

De acuerdo con la Cartera de Oportunidades de Inversión Extranjera 2016-2017, como mercados en desarrollo se encuentran Argentina, Estados Unidos, Bélgica, Luxemburgo y Dinamarca y, como potenciales, Rusia, Venezuela, Chile, Brasil y China.

En los primero tres meses de 2017 el sector turístico en la provincia sobrecumplió sus ingresos totales y en pesos convertibles en 21 % y 16 %, respectivamente, además de crecer en relación con la etapa precedente. Según González, se incrementan también las utilidades, con costos inferiores a lo planificado,  al igual que los ingresos turísticos, para un comportamiento favorable de forma integral, aun cuando se registraron menos turistas físicos en las instalaciones hoteleras comparado con 2016.

Complemento

Como en el resto del país, el alojamiento no estatal constituye un complemento en el alojamiento de visitantes internacionales. “En Cienfuegos su crecimiento tiene mayor velocidad que el hospedaje estatal, lo que permite disponer de 1 309 cuartos -de solo unos 600 hace un año-, y se mantiene la tendencia de continuar creciendo. Existen también 61 paladares”. Además de brindar una amplia variedad de servicios, las ofertas no estatales constituyen un permanente estímulo para elevar los estándares de calidad en el sector.

Los resultados actuales y los que están por venir favorecen y dependen de los diferentes eslabones de la cadena. A juicio del delegado del Mintur en Cienfuegos, “sin el trabajo de conjunto entre los organismo del territorio no avanzamos. Para desarrollar el turismo son imprescindibles las relaciones estrechas de trabajo con el Instituto de Planificación Física, la Oficina del Conservador de la Ciudad, el Ministerio de Ciencia Tecnología y Medioambiente (Citma) y la alianza con las autoridades del territorio”.

Cruceros

Cienfuegos es también una de las principales plazas para el crucerismo, junto a La Habana y Santiago de Cuba. Hasta marzo, de unos 150 previstos en el año, se habían recibido más de 40 toques de cruceros -durante 2016 fueron unos 80-, con más de 15 000 turistas, quienes visitan la ciudad durante las ocho horas de estadía en puerto.  Si bien arriban naves grandes como el Celestial Crystal o el Adonia, hacen escala también otros de menor tamaño como los Panorama 1 y 2. “La oferta que más compran es precisamente el recorrido que los lleva a los más importantes puntos de la urbe, así como la visita al Jardín Botánico”. Un crecimiento en los arribos de cruceros demandaría de la construcción de una terminal con todas las condiciones técnicas y de confort para responder a ese incremento.

Adicionalmente, como promedio, en la Marina de la ciudad -con 56 atraques-, se reciben unas 50 embarcaciones al día, lo que se considera un hotel flotante para unas 200 personas. Se proyecta que crezca en otros 200 atraques y se le incorporen alojamientos.

Mirada perspectiva

El polo turístico de Cienfuegos, que cuenta hoy con 11 hoteles, con 861 habitaciones, tiene un programa de desarrollo hasta 2030 que proyecta la construcción de nuevas instalaciones para ampliar la capacidad hotelera, unido al desarrollo de campos de golf -ambos incluidos en la Cartera de Oportunidades para la Inversión Extranjera-, que incluyen también infraestructura inmobiliaria. De hacerse realidad los proyectos, la provincia podría crecer y contar en el futuro con más de 15 000 habitaciones.

En el camino hacia el mañana, en el territorio se ha trabajado en la reconstrucción del Centro Internacional de Buceo de Faro Luna; mejoras en la Marina Marlin, con la terminación del muelle de su principal sede, instalación de muelles flotantes y nuevo sistema de alumbrado, entre otras; acciones de pintura y reposición de equipamiento en varias instalaciones; reparación de habitaciones y remodelaciones en el hotel Pasacaballos, así como inversiones en curso en el hotel Jagua, que incluyen mejoras a la piscina y a la planta habitacional.

“Una primera fase de las proyecciones está enmarcada en 2019, fecha en que la ciudad arriba a su bicentenario”, explica el delegado. Para entonces, se espera la culminación de un nuevo HE, el San Carlos, con 56 habitaciones, como parte de una estrategia que evoluciona de conjunto entre el turismo y las autoridades locales para dar nuevo valor de uso a un grupo de edificaciones con condiciones para convertirse en alojamientos e ir abriendo otros hoteles y hostales como una alternativa para ampliar la capacidad del sector estatal.

De cara al incremento del turismo, Cienfuegos trabaja también por promover los valores naturales y la vinculación ciudad-bahía-montañas con la formulación de una veintena de recorridos turísticos relacionados fundamentalmente con la sierra, el río Damují y la laguna Guanaroca, los senderos de Yaguanabo Arriba y el valle de la Iguana, entre otros, que se trabajan de conjunto con la Empresa Nacional para la Protección de la Flora y la Fauna.

Marcar la diferencia

Si bien no son pocos los ganchos para atraer, un particular elemento identifica al polo cienfueguero: su vocación por el medio ambiente.  De acuerdo con  el delegado de Turismo, el sector se suma a los esfuerzos de la delegación provincial del Citma por descontaminar la bahía,  con la instalación de plantas de tratamiento de residuales en las principales fuentes de vertimiento de residuales, entre esas el hotel Jagua. De tal forma, sostiene González, ni esa instalación insignia del turismo en Cienfuegos, ni la Casa Verde, ni el Perla del Mar, ni el Pasacaballos  vierten al mar aguas contaminadas.

La lavandería Unicornio del territorio, que asume la lencería de las tres provincias centrales, fue una de las primeras que se montó para evitar el vertimiento. Esa práctica se siguió también en el Club Cienfuegos y en Rancho Luna. “Con la instalación este año de una planta en el hotel Punta Las Cuevas, el turismo pondrá punto final al problema que representaba el vertimiento de los residuales al medio”, enfatizó.

“El sector ha trabajado también en la sustitución de las calderas de diésel en los hoteles por baterías de paneles solares en Pasacaballos y Rancho Luna para el aprovechamiento de las fuentes renovables de energía (FRE), lo que contribuye a reducir el uso de combustible fósil”, recalcó.

“No es casualidad, este año fue declarado por la Organización de Naciones Unidas (ONU) como el Año del Turismo Sostenible y de conjunto con la delegación provincial del Citma elaboramos  un plan de acciones dirigidas a mejorar el entorno y la calidad de vida”, destacó.  Como parte del programa, se labora para que todas las instalaciones turísticas cuenten con los avales del Citma, con prioridad en las bases de campismo pendientes, y lo ratifiquen aquellas que ya lo tienen.

“Se están terminando los expedientes de certificación del aval de Rancho Luna y Faro Luna. Existen dos instalaciones de servicios, que por la actividad que desempeñan así lo demandan -centro de elaboración y otro automotor-, también trabajan por acreditar sus avales”.  Según González, en 2016 concluyó el proceso de eliminación de aquellas construcciones violatorias del decreto 212, referido a las edificaciones sobre la duna.

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