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25 de Abril  2024 

Nuevas tecnologías impulsan en la Isla la producción de alimentos

Este accionar forma parte de los proyectos para la sustitución de importaciones, sobre todo de granos destinados al consumo humano y animal


Jueves 25 de Agosto de 2016 | 12:00:00 AM 

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La introducción de nuevas tecnologías que propicien el incremento de las producciones agrícolas en el país forma parte de los proyectos que se acometen en Cuba para sustituir las importaciones de alimentos, cuyos precios se encarecen cada vez más en el mercado internacional.

Una alta suma se destina cada año a la compra de granos (arroz, maíz, soya, entre otros), razón por la cual los mayores esfuerzos se realizan en su cultivo, acopio y conservación.

Una de las entidades beneficiadas ha sido la Empresa de Silos (Emsil), de Matanzas, donde se invierten este año unos 17 000 000 de pesos en moneda total, para dotar a sus instalaciones de modernos equipos que eleven la eficacia en la preservación de granos.

Se incluyen novedosos sistemas de termometría útiles para controlar, en tiempo real, parámetros como temperatura y humedad y el volumen de las gramíneas en una treintena de silos. También,  nuevas pesas digitales, laboratorios, sistemas de protección contra incendios y áreas fitosanitarias.

Ello posibilitará proteger mejoría  calidad del chícharo, maíz, soya, frijol, arroz y otros productos, recogidos en silos metálicos refrigerados a lo largo de todo el país.

Emsil tiene el cometido de conservar, almacenar, y comercializar granos en Cuba, y cuenta con un personal especializado que logra evitar la proliferación de plagas en los silos, donde se guarda el producto a una temperatura entre los 12 y los 17 grados Celsius.

La provincia yumurina cuenta, además, con un nuevo secadero de arroz, ubicado en la Unidad Empresarial de Base Camilo II, del municipio de Pedro Betancourt y el cual posibilitó la disminución del secado en plazoletas, carreteras y calles, y mayor calidad del producto final.

Esa instalación posee capacidad para recibir 37 toneladas diarias de granos, y desde su inauguración, brinda servicios a los productores de esa localidad y procesó ya unas 67 toneladas.

Valorada en medio millón de pesos cubanos y alrededor de 70 000 en moneda libremente convertible, esta obra se concluyó tras un proceso complejo iniciado en el año 2011, con la implementación de técnica vietnamita, que posteriormente fue desmontada.

El esfuerzo de trabajadores de la UEB, brigadas de la Empresa Agroindustrial de Granos, y la Empresa de Servicios Técnicos Industriales ZETI, tributaron al montaje del sistema criollo, que deberá procesar aproximadamente el 60 % del arroz que se produzca en el mencionado municipio.

También beneficia el procesamiento de ese grano la existencia de un laboratorio con equipamiento actualizado, que permite a los agricultores conocer, con alto grado de exactitud, los niveles de humedad, impureza y calidad del grano que cosechan.

Las labores de la Unidad Empresarial de Base Camilo II, perteneciente a la Empresa Agroindustrial de Granos Matanzas, no se limitan al secadero, también se ofrecen allí servicios integrales de atención a los productores de arroz mediante asistencia fitosanitaria y asesoramiento tecnológico

En Villa Clara

El proceso de tecnificación que tiene lugar en este territorio contribuyó al crecimiento en unas 28 260 toneladas de su producción agrícola durante el primer semestre de este año en relación con igual período de 2015.

Se pusieron en marcha más de 30 máquinas de riego, que  garantizan la humedad a los cultivos, acción que incide directamente con los rendimientos.

Desde hace más de un año se trabaja en la remodelación y puesta en marcha de los talleres para la maquinaria, la reparación de la red de canales que conducen el agua desde los diferentes acuíferos hasta las siembras, y el reordenamiento de otros servicios.

De enero a junio del presente año en la empresa agropecuaria Emilio Córdova, dedicada al cultivo y procesamiento del arroz, las áreas crecieron en 2 %, lo que significa 143,34 hectáreas (ha) plantadas por encima de lo planificado, al poner en marcha medios especializados para esa labor.

La estrategia diseñada para incrementar la producción agropecuaria de Villa Clara se sostiene en cuatro grandes polos de producción, de estos, los de mayor prioridad son los ubicados en las empresas agropecuarias Quemado de Güines y Valle del Yabú, en Santa Clara.

En la entidad de Quemado de Güines, los proyectos  incluyen el rescate de las siembras de diferentes variedades de plátano, en más de 180 hectáreas, aseveró Torna.

Son instalados sistemas de riego de pivote, porgoteo, entre otros, para atender la diversidad de bananos que se plantan en la zona, especializada tradicionalmente en ese cultivo.

La Empresa Agropecuaria Valle del Yabú, de  Santa Clara, cuenta con 10 tractores modernos, cuatro cosechadoras de granos, seis trailers para trasladar las cosechas y siete fumigadoras, entre estas cuatro integrales.

Este mejoramiento técnico permitió crecer en 152 ha, antes  cubiertas de marabú.

Modernización en Las Tunas

Mediante el Programa para el Desarrollo Rural Cooperativo de la Región Oriental, los agricultores de Las Tunas comenzaron a recibir nuevos equipos y tecnologías para aumentar la producción de granos .Ya disponen de varios tractores, máquinas sembradoras, cosechadoras, trilladoras  y arados, que serán empleados en distintos cultivos.

Se prevé la entrega próximamente de más de 300 sistemas de riego a 27 bases productivas, gran aporte al  Programa, que cuenta con el respaldo financiero del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola, adscrito a la Organización de Naciones Unidas y se implementó para darle cumplimiento a dos objetivos básicos: aumentar la disponibilidad de frijoles y maíz, mediante una mayor productividad, y fortalecer la calidad de vida de los campesinos y sus familias.

En el caso del maíz, además de elevar la oferta a la población, se persigue un suministro mayor a los animales, lo cual debe traducirse en más carne, huevos y leche.

En Las Tunas funcionan otros proyectos para la cosecha de granos, con la intervención de agencias de la ONU, Organizaciones no Gubernamentales y  los creados en distintos puntos de la geografía de la provincia.

El  Programa para el Desarrollo Rural Cooperativo de la Región Oriental, coincide con el esfuerzo que se realiza  para  explotar 31 polos productivos rescatados en los ocho municipios del territorio, con el objetivo fundamental de sembrar viandas, hortalizas y granos.    

Una de las mayores siembras en Ciego de Ávila

Labriegos estatales y del sector campesino de Ciego de Ávila sembraron en solo tres meses unas 10 000 hectáreas, correspondientes a la campaña de primavera, con vistas a garantizar más alimentos y sustituir importaciones de granos, sobre todo de arroz, frijol y maíz.

El área cubierta es una de las mayores de los últimos años y representa más de 80 % del total para plantar hasta el cierre del mes de septiembre, ascendente a unas 12 000 hectáreas, indicaron especialistas de la Agricultura.

Más de un centenar de colectivos de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) y de las empresas de cultivos varios La Cuba, Arnaldo Ramírez y El Mambí, están responsabilizados con el cumplimiento de la tarea, dirigida a una mayor producción en el segundo semestre del actual año y en los primeros meses de 2017.

La batalla agrícola apunta al mejoramiento de los mercados locales, los puntos de venta y los carretilleros, además de la ayuda a otros territorios como Santiago de Cuba y La Habana, hacia donde cada mes se envían elevados volúmenes de viandas, fundamentalmente de plátanos y otros alimentos.

En el período similar del año anterior la sequía castigó al  territorio avileño (con excepción de noviembre), pero las  cosechas del primer semestre de 2016 fueron aceptables, con 215 000 toneladas de viandas, hortalizas, granos y frutales, el 100 % de lo previsto.

Sin embargo, el arroz, el maíz, la papa y el tomate quedaron  por debajo de lo pronosticado por la carencia de humedad y las altas temperaturas.

Los cooperativistas avileños aportaron de enero a junio el 65 % del total de alimentos del agro y la mayor parte de las 3 500 toneladas de frijoles  cosechadas, aunque la recogida de ese grano fue inferior a lo estipulado.

Esfuerzo en Santiago de Cuba

Las campesinas ocupan un lugar privilegiado en puestos de dirección de la ANAP en el territorio de Santiago de Cuba, donde el 63 % son jefas de estructuras productivas de base, municipios y provincia.

En el  Consejo Popular Laguna Blanca, localidad de Contramaestre, Elsa Chacón es ejemplo del quehacer exitoso de las campesinas santiagueras.

Ella administra la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) Amado Rosales, donde en compañía de 180 socios se encarga de producir alimentos para el pueblo.

Cultivan 1 500 hectáreas, de esas 1 200 dedicadas a los granos, hortalizas, frutas y viandas, y 300 están dirigidas al desarrollo del ganado mayor y menor.

Ellos pertenecen al Proyecto de Desarrollo Rural y Cooperativo (Predecor) en la zona oriental del país para garantizar el incremento de la producción de alimentos, desplegar las capacidades productivas de los cooperativistas y productores y elevar el nivel de vida de los pobladores del campo.

La primera etapa de esa iniciativa se puso en práctica en la CCS hace un tiempo, con la entrega de tractores e implementos agrícolas para mejorar las condiciones de trabajo de los agricultores.

Sobresalen las máquinas cosechadoras, desgranadoras, cultivadoras, sistemas de riego y motomochilas, además de la remotorización del transporte, entre otras ventajas.

En 2015 completaron 4  119 toneladas (ton) de maíz y otras 100 de frijoles, mientras para el actual año aspiran a superar ambas cifras, pues tienen más y mejores recursos materiales.

Predecor es un programa con crédito del Fondo Internacional de Desarrollo Agropecuario (FIDA) y en esta ocasión favorece a productores y cooperativistas de los territorios  de Granma, Holguín, Las Tunas y Santiago de Cuba.

Complejo arrocero beneficiará a productores pinareños

El complejo agroindustrial arrocero de Mantua, en Pinar del Río, beneficiará a productores del grano de ese territorio y de Sandino, Guanes y Minas de Matahambre, a partir de los servicios del molino, el secadero, talleres y un centro para la venta de insumos.

"Se trata de asegurar logísticamente el crecimiento de la producción del cereal" según explicó a la prensa Gustavo Rodríguez Rollero, ministro de Agricultura, durante una visita a este lugar.

Agregó que no solo se recibe y compra el arroz a los productores, también el complejo cuenta con implementos en pos de apoyar todos los servicios requeridos en la siembra y cosecha del alimento.

Aportar la materia prima que necesita la industria, ascendente a más de 7 000 toneladas del grano cada año, constituye el principal reto para los campesinos, toda vez que la presencia de molino y secadero deviene incentivo para incrementar las producciones, precisó.

"En 2010 se edificó el molino ante el fuerte movimiento de arroz  en Mantua, y de ahí el estudio de factibilidad para instalar el secadero", aseveró Yoel Ribet Molleda, director general de la Empresa Agroindustrial de Granos Los Palacios, quien también se refirió al considerable ahorro de combustible al no tener que transportar el cereal hacia otro sitio.

Toda la obra civil de la tecnología destinada para secar ya está culminada, y casi el 100 % de los equipos probados, por lo cual desde su puesta en marcha podrá procesar 37 toneladas de arroz cáscara húmedo por día.

No obstante, los niveles productivos de los cuatro municipios solo completarían hoy el 15 % de la capacidad instalada de la fábrica, acotó.

El programa arrocero de la occidental provincia permitirá la ejecución de inversiones a favor del desarrollo agrícola, y se plantea la satisfacción de las demandas de materias primas del complejo.

Sin contratiempos en la infraestructura hidráulica, Pinar del Río aspira a obtener unas 60 000 toneladas de arroz para 2020, y Mantua representaría el 8 % de esa producción, por lo que sería capaz de abastecer a los pobladores del municipio.

Hasta ahora el cereal se seca de manera manual mediante el empleo de mantas, técnica que imposibilita el escurrido homogéneo y resulta insuficiente para los volúmenes de producción previstos en el futuro, puntualizó Ribet Molleda.

Avances en Sancti Spíritus

Esta provincia avanza en el proceso inversionista que ejecuta en la Empresa Agroindustrial de Granos Sur del Jíbaro -rectora de la actividad en el territorio-,  y tiene como propósito el mejoramiento de la infraestructura industrial y disminuir aún más el consumo de agua, que al cierre de 2015 promedió los 15 500 metros cúbicos por hectárea.

Trabajan en las bases de almacenes de Tamarindo -incluye molino y secadero-, en la pavimentación de sus áreas interiores y en la báscula, acciones que en su totalidad están valoradas en un millón de pesos.

Igualmente se ejecutan mantenimientos en las industrias de Las Nuevas, Los Españoles y en el molino Manolo Solano, instalación esta última que asume en estos momentos la producción de la empresa.

Paralelamente a este programa inversionista y a la reparación del primer tramo del Canal Magistral Zaza -cuya reapertura aconteció el primero de mayo-, hasta finales de junio se trabajó en 384 kilómetros de canales y 295 obras de fábrica. Un total de 24 brigadas llegaron a laborar al unísono en los extensos terrenos del Sur del Jíbaro, esfuerzo que facilitó, a su vez, colocar 119 hidromecanismos nuevos y avanzar en la perforación, aforo y construcción de casetas de los 40 pozos proyectados en la zona y que en su conjunto, posibilitarán inyectar un volumen considerable de agua a los arrozales.

La rehabilitación iniciada en el Magistral -una obra de vital importancia para el desarrollo agrícola y cuya reparación integral contribuirá a recuperar unos 90 millones de metros cúbicos del líquido- apenas les permitió a los productores del grano de esta región plantar en la campaña de frío 1 158 hectáreas destinadas a semilla.

El principal reto que enfrentan hoy los arroceros del territorio es el déficit de piezas de repuesto para las 46 máquinas cosechadoras del complejo; no obstante, actualmente apoyan la cosecha de la gramínea en la provincia de Granma, sitio donde laboran seis de estos equipos, tractores y otros medios que facilitan el traslado del cereal.    

Mayabeque con nuevas instalaciones

La instalación de un nuevo secadero y la puesta en marcha de otras líneas de secado y molinado en la Unidad Empresarial de Base, ubicada en Bizarrón, municipio de Güines, destacan entre las inversiones previstas para el presente calendario en la Empresa Provincial de Grano de Mayabeque.

En esta provincia  se cultivan frijol, soya y maíz por lo que directivos y agricultores trabajan en el crecimiento de las zonas cultivables hasta alcanzar 2 000 hectáreas, todas concebidas con sistemas de riego y en condiciones de aportar más de 15 000 toneladas de granos al finalizar cada campaña.

Desde 2009 aquí se pone en práctica el proyecto cubano-vietnamita de Cooperación para el Desarrollo de Cultivos de Maíz y Leguminosas auspiciado por el Instituto de Investigaciones de Granos (IIG), perteneciente al Ministerio de la Agricultura, mediante el cual se fortalecen los vínculos agrícolas entre ambas naciones y se obtienen  variedades de granos de alta calidad y adaptables a las adversidades del cambio climático. (Fuentes: Agencia Cubana de Noticias y periódico Granma)

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