Autor: Internet Publicado: 21/06/2021 | 09:34 pm
Casi a las afueras de la ciudad de Pinar del Río, en el reparto Cuba Libre, una iniciativa germinó hace dos décadas fruto de la creación del artista y artesano Jorge L. Milán Domínguez, con el objetivo de fabricar humidores y engalanar al territorio del mejor tabaco del mundo.
El proyecto De Cuba, Arte en Madera distingue a la provincia más occidental de la Isla con su considerable aporte a la sustitución de importaciones y los ingresos generados al país por concepto de exportaciones.
Desde el año 2000, sus artistas miembros envían humidores y envases a más de 75 naciones del orbe, gracias a la excelencia de sus producciones, todas con el sello de Habanos S. A, que le ha permitido aumentar considerablemente la demanda de sus piezas.
Para la creación de humidores muchas veces los artistas se inspiran en personbalidades cubanas, como es el caso de Alejandro Robaina, cuyas vegas dieron nombre a esa conocida marca.
Elaborados con cedro, los humidores constituyen piezas de elevado valor artístico, e influyen en el reconocimiento internacional del proyecto.
La integración y complementación de su colectivo han sido determinantes para el desarrollo de la mencionada iniciativa.
Diversidad de diseños y estilos caracterizan las obras de los creadores de este proyecto.
Los humidores deben tener los patrones indicados en cuanto a temperatura y humedad para conservar adecuadamente los tabacos.
De Cuba, Arte en Madera promueve la cultura nacional, mediante la comercialización de sus obras en 147 Casa del Habano de disímiles países y ciudades del mundo.
El proyecto ha realizado innumerables series limitadas, exclusivas para sus clientes.
Expuestas en 72 eventos internacionales hasta la fecha, las piezas también han participado en subastas y cuentan con clientes estables. (AIN)
