La integración latinoamericana quedó fortalecida en la XXX Cumbre del MERCOSUR, celebrada el viernes último en Córdoba, Argentina, con la participación de Venezuela como nuevo miembro pleno del bloque, que integran además Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay.

Asistió como invitado especial el Presidente cubano Fidel Castro, cuya presencia acaparó la atención de la Cumbre y de los argentinos en su cuarta visita a esa nación sudamericana.

Fidel fue invitado por su homólogo argentino Néstor Kirchner, quien durante el primer semestre de este año ejerció la presidencia temporal del mayor bloque político-comercial de Sudamérica.

Este fin de semana Cuba y el MERCOSUR firmaron un Acuerdo de Complementación Económica para armonizar los convenios bilaterales que los cuatro países fundadores de esa asociación mantienen con la Isla .

En la inauguración de la reunión el ministro de Relaciones Exteriores del país anfitrión, Jorge Taiana, afirmó que la incorporación de la República Bolivariana a la asociación sureña como su quinto miembro pleno demuestra la vitalidad de la unión aduanera nacida hace 15 años.

Tras aseverar que la llegada de Caracas representa un salto cualitativo, subrayó la necesidad de avanzar en la profundización del bloque mediante la integración productiva, tema que definió como prioritario para el futuro regional.

Por su parte, en una cena en honor a los presidentes participantes Kirchner expresó que la unidad “nos hará más fuertes, más sólidos y más competitivos en este mundo globalizado.”

Remarcó que el MERCOSUR debe orientarse a lograr un desarrollo sustentable y equitativo para todos sus Estados miembros, para lo cual se requiere afrontar y solucionar las diferencias entre ellos. La integración productiva es decisiva si queremos una visión del MERCOSUR que beneficie a todos, que no sea solo concebido como una cuestión comercial, apuntó.

En esos términos, creemos necesario trabajar en el diseño de un banco nacional de desarrollo para financiar los proyectos de interés común, agregó. Destacó particularmente el ingreso de Venezuela y la trascendencia que ello reviste.

Tras sostener que ese bloque constituye la plataforma básica para la inserción de sus miembros en el mundo, abogó por avanzar en su profundización y perfeccionamiento.

Ese será el camino, subrayó, para hacerlo más eficiente, participativo, integral y útil para todos los ciudadanos de los países integrantes.

“Estoy convencido de que si se quiere avanzar en la integración regional, es necesario enfrentar y resolver diferencias para convertirlas en una agenda común”, afirmó.

Dijo que como todo proceso de integración, en cualquier parte del mundo, el de Sudamérica también es el resultado de un cambio complejo, largo y sinuoso.

En Córdoba se establecieron compromisos para iniciar la redacción del Código Aduanero Común, que entrará en vigencia a partir de 2008 y se sellaron pactos comerciales con otras naciones.

Los gobernantes avanzaron en la profundización institucional y en la liberalización del comercio de servicios dentro de la unión aduanera creada en marzo de 1991.

Además de destacar la adhesión de la República Bolivariana de Venezuela en tiempo récord, concretada en Caracas el 4 de julio último, la Cumbre abordó las asimetrías comerciales y la consolidación de la relación Argentina-Brasil, los socios mayores del MERCOSUR.